Latinoamerica. El recrudecimiento de las tensiones entre Estados Unidos, Rusia y China reaviva el fantasma de una Tercera Guerra Mundial y coloca a varios países latinoamericanos en una posición vulnerable ante un posible conflicto global.
Un análisis realizado por Inteligencia Artificial identificó las naciones del continente que enfrentarían mayor riesgo debido a sus alianzas estratégicas con potencias involucradas, su infraestructura militar, sus recursos naturales clave o su relevancia política regional.
Los movimientos geopolíticos, las nuevas alianzas militares y la expansión de armamento de última generación generan preocupación mundial sobre qué territorios latinoamericanos serían los primeros afectados si el conflicto escalara.
Colombia encabeza la lista de países en riesgo por su alianza histórica con Estados Unidos y su papel como socio estratégico en Sudamérica, lo que la ubica como posible blanco de represalias.
Bogotá, como capital política y centro militar, sería uno de los puntos más sensibles por su ubicación en el corazón del continente, que la convierte en un corredor geopolítico relevante para las potencias.
Venezuela también figura entre las naciones más expuestas debido a su relación directa con Rusia e Irán, dos actores centrales en el conflicto global.
Su enorme reserva petrolera y la presencia de cooperación militar extranjera hacen de Caracas un objetivo prioritario cuya caída afectaría el suministro energético de toda América Latina y alteraría el equilibrio político regional.
México enfrenta un escenario complejo por su posición como vecino inmediato de Estados Unidos. La Ciudad de México, núcleo político y económico del país, sería vulnerable ante un conflicto transfronterizo o ataques dirigidos a desestabilizar a su aliado norteamericano. Además, su cercanía con bases militares estadounidenses en el sur de EE.UU. incrementa su nivel de exposición en una guerra de gran escala.
El estudio de IA plantea que las primeras naciones latinoamericanas en caer serían aquellas que mantienen alianzas estratégicas con potencias involucradas o que poseen recursos naturales y logísticos clave para el desarrollo del conflicto.
Brasil, como la mayor potencia de Sudamérica, ocuparía un papel determinante en cualquier escenario bélico global.
Su poder financiero y su tamaño territorial lo convierten tanto en una fortaleza como en un blanco estratégico de alto valor. São Paulo, centro económico y financiero, podría ser uno de los primeros objetivos para desestabilizar los mercados, mientras que Río de Janeiro figura entre las ciudades más vulnerables por su relevancia militar y simbólica.
El análisis considera que el impacto sobre Brasil tendría repercusiones inmediatas en toda la economía latinoamericana.
Argentina completa la lista de países afectados debido a su posición geopolítica en el Cono Sur. Buenos Aires, como capital y principal puerto de comercio internacional, se considera un punto crítico en las rutas logísticas globales.
Su infraestructura portuaria, su peso diplomático y su conexión con organismos internacionales la hacen un objetivo de alto valor simbólico y estratégico.
El escenario planteado por Inteligencia Artificial subraya que la vulnerabilidad de estos cinco países no solo radica en su ubicación geográfica, sino en su importancia económica, política y militar dentro del tablero geopolítico mundial.
