Los Ángeles, California. La carrera de Sydney Sweeney en Hollywood atraviesa su momento más crítico tras el estrepitoso fracaso de ‘Christy’, que acumula uno de los nueve peores estrenos de todos los tiempos para una cinta exhibida en más de 2,000 salas de Estados Unidos.
La actriz, que alcanzó su cúspide con el rotundo éxito de ‘Cualquiera menos tú’, ahora enfrenta tres desplomes consecutivos en taquilla que ponen en jaque su estatus como figura estelar.
‘Christy’ recaudó apenas 1.30 millones de dólares durante su primer fin de semana en cartelera estadounidense, cifra catastrófica que anticipa la pérdida inminente de la mayoría de sus pantallas en cuestión de días.
La película, que parecía diseñada como vehículo de prestigio para posicionar a Sweeney rumbo a los Óscar, obtuvo un tibio 67% de valoraciones positivas en Rotten Tomatoes, aunque las críticas resultan secundarias frente al desinterés absoluto del público.
El naufragio de ‘Christy’ confirma una tendencia que ya anticipó el reciente desastre de ‘The Smashing Machine’: las audiencias norteamericanas rechazan los biopics deportivos sobre figuras poco conocidas, sin importar quién encabece el reparto.
Hollywood insiste en estas producciones que solo consiguen perder dinero a raudales, mientras los espectadores demuestran con sus bolsillos que este género no les atrae.
La debacle de Sweeney se agrava con una polémica reciente protagonizada por la actriz, quien se negó a disculparse por la controversia desatada alrededor de la campaña promocional de American Eagle, decisión que generó oleadas de comentarios adversos en redes sociales.
Este tropiezo mediático se suma a su racha negativa en cartelera, que incluye también ‘Edén’ y ‘Americana’, thriller cuyo lanzamiento cinematográfico sufrió un retraso de dos años.
La actriz acumula tres fracasos comerciales consecutivos que cuestionan seriamente su capacidad de convocatoria en taquilla.
Aunque ‘Immaculate’ mostró resultados aceptables, el panorama actual exige que Sweeney logre un golpe contundente en su próximo proyecto, pues su condición de estrella pende de un hilo y no tolera otro descalabro de esta magnitud.
